La Tolerancia a fallos es un paso más allá de la alta disponibilidad. Si la alta disponibilidad permitía reiniciar una máquina virtual en un servidor alternativo en caso de fallo del servidor donde se estaba ejecutando, esta funcionalidad permite la disponibilidad permanente a nivel de aplicación. De esta manera, previene de pérdidas de servicio y de datos en caso de fallo en el servidor VPS.
Esta funcionalidad es aplicable a una aplicación empresarial en la cual una mínima pérdida de servicio o de datos puede suponer pérdidas perjudiciales para la empresa.
Las plataformas tradicionales solucionaban este tipo de situaciones mediante redundancia de hardware o clustering. Es decir, soluciones complejas y costosas. Nuestra solución, ofrece continuidad operacional y altos niveles de disponibilidad a un coste menor que en plataformas tradicionales.
Cuando se habilita la Tolerancia a Fallos para un determinado Servidor Virtual VPS, se crea una imagen en vivo ejecutándose en otro servidor físico. Los dos servidores virtuales actúan conjuntamente ejecutando el mismo conjunto de eventos ya que reciben las mismas entradas en un determinado instante de tiempo.
De cara al exterior los dos servidores virtuales aparecen como una misma entidad con una única dirección IP y disco duro virtual, siendo el primario el único que puede escribir sobre dicho disco.
Continuamente, los servidores virtuales se mandan pulsos entre ellos y, en el momento que se pierde la conectividad, el secundario pasa a realizar tareas de primario. Estos pulsos se envían en intervalos de milisegundos consiguiendo que la tolerancia a fallos sea instantánea.
En esta página podréis ver un vídeo demostrativo de cómo funciona la Tolerancia a Fallos.